Serra Soldadura

Serra Soldadura fue fundada en 1934 en Barcelona como un pequeño taller dedicado a la concepción y fabricación de máquinas de soldar al arco y hornos industriales. En el 1942 se incluye en la gama de actividades la tecnología de soldadura por resistencia. 

Es en 1972 cuando la empresa pasa a ocupar la ubicación actual en la Zona Franca de Barcelona, al lado del aeropuerto. 

Aprovechando las importantes inversiones en la industria automovilística en España durante las décadas de los 70, 80 y 90, Serra Soldadura se convierte en una ingeniería y constructora de líneas de ensamblaje para carrocería de automóvil, operando en buena parte de Europa, estableciendo sucursales en Portugal y Francia. En los años 90 llega a establecerse en Brasil, llegando también a expandirse a México en 2016.

Parte de la actividad sigue siendo el desarrollo de tecnología propia para la gestión de la corriente en procesos de soldadura de arco o de resistencia.

La empresa y su plantilla logran mantenerse en cada momento a la altura de las exigencias de la tecnología del momento, en continua y rápida evolución: la revolución electrónica tanto en los equipos de desarrollo propio como en los ajenos a utilizar, la robotización de los procesos de ensamblaje, la “computarización” y  la virtualización de los procesos de ingeniería, empujados y desafiados por la industria del automóvil, siempre puntera.

“Era la adopción temprana por parte de Serra del Catia V5, anticipándose al cambio por parte del Grupo VW anunciado en el 1996, la que abrió camino en el sector de la aeronáutica: un impulso importante para la empresa en términos de inversión interna y de exposición a otro mercado.”

En el año 2004 la familia Serra opta por nombrar el primer gerente ajeno a la misma y empieza una fase de cierta profesionalización y racionalización del conjunto de actividades y de la organización, dando lugar a una estructura de tres áreas de negocio: Producto, Automoción y Aeronáutica. Especialmente la última formaba la base de las proyecciones de crecimiento. Sin embargo, un cúmulo de lastres económicos del pasado mal gestionados acabó de poner la empresa en una situación muy complicada entre el 2006 y el 2008. La adquisición por parte de Aernnova evitó una quiebra.

Es en el nuevo contexto de Aernnova cuando Serra vive la crisis del 2008, de gran impacto en su principal industria, la automoción. Serra sobrevive a ella gracias al proceso de restructuración que se lleva a cabo y gracias a las cargas de trabajo que Serra aeronáutica puede realizar para proyectos internos de Aernnova.

El camino hacia volver a ser una empresa viable y apreciada en su mercado ha sido enfocarse de nuevo en automoción y en clientes Tier1 en lugar de OEM,así como en procesos para una categoría de productos determinada  conocida como “chassis».

Dentro del conjunto de Serra, es en Serra México dónde se espera que se materialice el crecimiento: la buena posición ganada con clientes de la región USMCA (antes Nafta) le proporciona un gran potencial.